Alabar a Dios


Este pueblo he creado para mí; mis alabanzas publicará. Isaías 43:21

Hay momentos que tan solo deseamos cerrar los ojos y alabar a Dios, tan solamente alabarle, y no pretendemos más, tan solo quisiéramos estar con un grupo de personas que aman a Dios y sin importar nada más dedicar un tiempo de adoración a El.

Poder expresar todo el amor que sentimos en lo profundo del corazón, sin que nadie interfiera en nuestra adoración, y con total libertad, que cada uno lo alabe por si mismo, sin que otros estén instando desde algún estrado; si no que todo sea espontáneo y por amor.


Comentarios