Estén, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estén otra vez sujetos al yugo de esclavitud. Gálatas 5:1
Antiguamente en el campo había una leyenda que asustaba a la gente, era el perro con cadena, muchos aseguraban que lo habían visto y generalmente todos le tenían miedo.
Pero en esta ocasión, vamos a hablar un poco del perro sin cadena, es mi perro, al cual yo puedo pasear sin necesidad de la cadena ni collar; porque el me obedece.
Nunca pude ponerle collar; solo existe un laso entre el y yo; y es el amor, el me obedece cuando le hablo, aunque a veces deba repetirles las palabras o elevar un poco el tono de vos.
En 6 años solo dos o tres veces tuve que aplicarle algunas palmadas, pero lo que verdadera mente hace que me obedezca es la relación entre el y yo. (perro - humano)
Me entiende cuando le hablo y se hace entender perfectamente cuando quiere algo o necesita alguna cosa. Creo que puedo aplicarlo al ejemplo que pretendo dar, sin intención de ofender a nadie.
Al fin y al cabo, Jesús nos comparó con sus ovejas, ¿Porque digo; el perro sin cadena? Porque es bueno obedecer a Dios sin la necesidad de un yugo o algo que en cierto modo nos obligue a hacer su voluntad.
El secreto siempre está en la relación, si amo a Dios, si estoy a diario con el, si hablo y medito en su palabra; El llegará a ser parte de mi vida, sin necesidad de que me vuelva un religioso.
El secreto siempre está en la relación, puedo ir todos los días a la iglesia y no tener una relación personal con Dios. Esa relación es la que me va a llevar a querer agradarle y hará que me sienta mal cuando hago cosas que no debo.
Si solamente le hago caso por que me ve el pastor o algún hermano de la iglesia, verdaderamente, por dentro estoy vacío. Si solo hago las cosas solamente para agradar a mis padres, por dentro tengo muy poco de este Dios real y verdadero.
Hoy te invito... así, a solas; comienza a relaciónarte con Dios, vívelo, experimentalo tú mismo, y vivirás una experiencia única que durará para siempre.
Nadie podrá decir: "se apartó" porque quién querrá separarse del ser a quién ama, podrán cansarte los argumentos de los hombres, las religiones; pero Dios jamás.
Antiguamente en el campo había una leyenda que asustaba a la gente, era el perro con cadena, muchos aseguraban que lo habían visto y generalmente todos le tenían miedo.
Pero en esta ocasión, vamos a hablar un poco del perro sin cadena, es mi perro, al cual yo puedo pasear sin necesidad de la cadena ni collar; porque el me obedece.
Nunca pude ponerle collar; solo existe un laso entre el y yo; y es el amor, el me obedece cuando le hablo, aunque a veces deba repetirles las palabras o elevar un poco el tono de vos.
En 6 años solo dos o tres veces tuve que aplicarle algunas palmadas, pero lo que verdadera mente hace que me obedezca es la relación entre el y yo. (perro - humano)
Me entiende cuando le hablo y se hace entender perfectamente cuando quiere algo o necesita alguna cosa. Creo que puedo aplicarlo al ejemplo que pretendo dar, sin intención de ofender a nadie.
Al fin y al cabo, Jesús nos comparó con sus ovejas, ¿Porque digo; el perro sin cadena? Porque es bueno obedecer a Dios sin la necesidad de un yugo o algo que en cierto modo nos obligue a hacer su voluntad.
El secreto siempre está en la relación, si amo a Dios, si estoy a diario con el, si hablo y medito en su palabra; El llegará a ser parte de mi vida, sin necesidad de que me vuelva un religioso.
El secreto siempre está en la relación, puedo ir todos los días a la iglesia y no tener una relación personal con Dios. Esa relación es la que me va a llevar a querer agradarle y hará que me sienta mal cuando hago cosas que no debo.
Si solamente le hago caso por que me ve el pastor o algún hermano de la iglesia, verdaderamente, por dentro estoy vacío. Si solo hago las cosas solamente para agradar a mis padres, por dentro tengo muy poco de este Dios real y verdadero.
Hoy te invito... así, a solas; comienza a relaciónarte con Dios, vívelo, experimentalo tú mismo, y vivirás una experiencia única que durará para siempre.
Nadie podrá decir: "se apartó" porque quién querrá separarse del ser a quién ama, podrán cansarte los argumentos de los hombres, las religiones; pero Dios jamás.
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