
No los dejaré huérfanos, vendré a ustedes. Juan 14:18
Huérfanos, muchas veces de padre, huérfanos de religión, aún teniendo padre, aún teniendo religión, nos suele pasar a muchos de nosotros, incomprendidos y aún despreciados, quizá por quienes más nos debieran amar.
Así es la condición de la mayoría de las personas, así fue en muchas oportunidades mi condición, fui un huérfano de padre aún teniendo a mi propio padre cuando era niño, y fui huérfano de mi religión aún teniendo religión.
Solo en esta vida, sin que nadie pudiera darme la respuesta que mi corazón anhelaba, así lo descubrí a El, Santo y puro, lleno de un tierno amor que mi alma necesitaba, el llenó mi corazón y pudo responder a muchas de mis preguntas que a solas me preguntaba.
El, es el consolador, el Espíritu Santo que permanece a tu lado, y no solo cerca tuyo sino aún más, el permanece dentro de tu ser.
Es Cristo en ti, esto no significa que el habite dentro de tu capacidad torácica, sino que más allá de tu humanidad física, tu y yo somos seres espirituales y allí, en nuestro espíritu le hemos dado lugar para que habite cerca nuestro para siempre.
Y así El vendrá a buscarnos para que donde El esta, nosotros también estemos.
Comentarios
Publicar un comentario