Fe

Jesús les dijo: porque tienen poca fe; porque de cierto les digo, que si tuvieran fe como un grano de mostaza, dirían a este monte: Pásate de aquí para allá, y se pasará; y nada les será imposible.
Mateo 17:20

Para Jesús era tan natural creer, la vida cristiana, según sus enseñanzas, era como algo cotidiano, como el padre y madre en el hogar que deja en sus hijos principios fundamentales de la vida, en cada pequeño acto, en cada situación que se presenta. Y la fe como parte de un todo, uniendo todas las piezas de un rompe cabezas que solo se entiende cuando terminamos creyendo en Dios como el hacedor de nuestras vidas.

Jesús no enseñaba que para cada decisión de fe había que realizar una ceremonia religiosa, la fe estaba siempre allí como un elemento de cocina, donde cualquier persona podía echar mano de ella y creer en las cosas imposibles de una manera tan simple como cuando piensas que la comida tomará gusto, por el solo hecho de haberle agregado un puñado de sal.

Los hombres inventaron una especie de religión para sacar provecho de las cuestiones de fe, y de ese modo fueron haciendo difíciles las cosas espirituales para las personas, porque; ¿donde podían obtener de la gente un beneficio, sino dentro de un formato religioso? y así fueron limando lentamente esa posibilidad de que el hombre y la mujer puedan manejar sus asuntos espirituales de la manera más sencilla y cotidiana posible.

Jesús solo nos insta a creer, y siendo así podemos esperar hasta el milagro más maravilloso por el solo hecho de confiar en él de todo corazón.