¡Cuan hermoso son sobre los montes los pies del que trae alegres nuevas, del que anuncia la paz, del que trae nuevas del bien, del que publica salvación, del que dice a Sion: ¡Tu Dios reina! Isaías 52:7
Que hermoso es compartir estas bendiciones, poder decir a los demás la maravillosa experiencia de conocer a Dios, poder llevar paz a los hogares y poseer siempre una palabra de bien para nuestro prójimo.
que hermoso es poder hablar con sabiduría, poseer el don de saber decir las cosas para que la gente pueda comprender con sencillez el mensaje del evangelio.
Que bueno es no tener arrogancia cuando predicamos la palabra de Dios y podemos decir a las personas que somos igual a ellos, que nos equivocamos como se equivocan ellos y hacemos muchas veces cosas que no debiéramos hacer.
Que bueno es hacer sentir a los demás que no somos los poderosos ni actuamos cómo los dueños de la verdad, que somos capaces de escuchar y de aprender; pero a la ves tenemos un mensaje de paz y de amor que puede transformar las vidas de quienes escuchan.
Que bueno es obedecer a Dios cuando El nos dice que vayamos y llevemos el precioso mensaje de la Palabra de Dios.
Que hermoso es compartir estas bendiciones, poder decir a los demás la maravillosa experiencia de conocer a Dios, poder llevar paz a los hogares y poseer siempre una palabra de bien para nuestro prójimo.
que hermoso es poder hablar con sabiduría, poseer el don de saber decir las cosas para que la gente pueda comprender con sencillez el mensaje del evangelio.
Que bueno es no tener arrogancia cuando predicamos la palabra de Dios y podemos decir a las personas que somos igual a ellos, que nos equivocamos como se equivocan ellos y hacemos muchas veces cosas que no debiéramos hacer.
Que bueno es hacer sentir a los demás que no somos los poderosos ni actuamos cómo los dueños de la verdad, que somos capaces de escuchar y de aprender; pero a la ves tenemos un mensaje de paz y de amor que puede transformar las vidas de quienes escuchan.
Que bueno es obedecer a Dios cuando El nos dice que vayamos y llevemos el precioso mensaje de la Palabra de Dios.
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